Y no creas que haya intentado pensar en algo coherente, pero es que ya mi cerebro colapsó de tanto pensar, que perdí la razón…
Mis ideas se han escapado de mi mente. Todo lo que anhelaba se convirtió en catarsis para poder drenar aquél veneno agradable que de a poco, como suero, me fuiste inyectando.
Y te quiero, sí, y mi amor te di en forma de palabras.
Y te extraño, sí, y mi amor no quiere poner punto final.
Hojas abolladas, por ideas perdidas, palabras que nunca fueron necesarias decirlas.
Páginas viejas, que hoy arden por el rojo vivo de la hoguera.
Cenizas que vuelan hoy, en un cielo perdido.
Y aún te quiero, si, y por eso no deseo olvidar.
Y aún te extraño, sí,
Y por eso quise a esto, ponerle puntos suspensivos…


05/10/08